Los Lumad; el nuevo blanco del presidente filipino. Foto: Davao Today
Los Lumad; el nuevo blanco del presidente filipino. Foto: Davao Today

Luego que el presidente Rodrigo Duterte haya afirmado que lanzaría bombas contra las escuelas del grupo indígena Lumad, un grupo de expertos de la Organización de las Naciones Unidas ha solicitado al gobierno que atienda las violaciones a derechos humanos.

El gobierno justificó que se enseña a los niños “a rebelarse contra el gobierno” y cree que esta comunidad se encuentra apoyada por grupos rebeldes.

Debido a lo anterior y en el marco de una proclamada guerra contra el narcotráfico, el grupo de relatores especiales integrado por Agnes Callamard, Michel Forst y Maud de Boer-Buquichio, aseveró que la escalada de violencia está afectando a muchos grupos de la sociedad, además, indicaron que los menores de edad son quienes más expuestos se encuentran frente a la explotación sexual, la venta de personas y ejecuciones.

En la presentación de los relatores, se destacó que en Filipinas, algunas comunidades han sido víctimas de asesinatos, amenazas y ejecuciones masivas de niños, acciones perpetradas por las fuerzas armadas nacionales.

El caso de la población indígena de Lumad sirvió de ejemplo para ilustrar esta situación, ya que este grupo se encuentra protegiendo su tierra frente a proyectos de inversión, muchos, según indican los expertos, han perdido la vida y han sido ejecutados fuera de los procesos legales ordinarios.

 

Agreden a activistas

Luego de la rueda de prensa, los especialistas hicieron entrega de un comunicado donde reza: “Estamos sorprendidos por el aumento de la violencia, la intimidación y el hostigamiento que sufren los defensores de derechos humanos que protegen a los pueblos indígenas, los sindicatos, los agricultores y sus familiares”

Frente a la aseveración de Duterte, asociaciones defensoras de los derechos humanos en el país, han solicitado que el presidente se retracte de sus declaraciones, hecho que no ha ocurrido aún; sin embargo, la Fuerza Armada ha asegurado que nunca se bombardearía esa comunidad.

El vocero Restituto Padilla aseguró que el mensaje de Duterte fue únicamente una advertencia para las instituciones educativas que operan en la zona sin permiso.

El grupo Lumad cuyo significado es indígenas, se compone de 18 comunidades etnolingüísticas, la zona que habitan, se encuentran desde mayo pasado bajo la ley marcial. Además, esta región ha sido altamente codiciada por empresas multinacionales de extracción de recursos naturales, como la minería.

A comienzos de este mes 60 soldados obligaron a los pobladores de Lianga. De este suceso resultaron desplazados 633 estudiantes y 43 maestros, lo que motivó que por más de 10 días un grupo de 200 estudiantes instalaron un campamento en la ciudad de Davao con la exigencia de “terminar la militarización de las comunidades Lumad.