Ante nuevas normas y la detención de un chofer mexicano en Belice, los transportistas de ambos lados de la frontera, han disminuido el cruce y se han tenido que movilizar a una nueva terminal, lo que ha causado una afectación económica para los comerciantes mexicanos.
A través de una alerta, la embajada mexicana en suelo beliceño, recomendó que el transporte público quintanarroense evite transportar personas al país vecino.
Lo anterior ocurrió, luego que un taxi mexicano transitó a una persona hacia la aduana beliceña y se descubriera que el pasajero poseía más de un kilo de marihuana, motivo por el que tanto el mexicano como su cliente, fueron arrestados por las autoridades beliceñas.
La alerta intenta que los transportistas mexicanos no ingresen a territorio beliceño y con ello puedan ser señalados como cómplices de los actos ilícitos de quienes contraten sus servicios. En el marco de esta recomendación, la Secretaria de Comunicaciones y Transportes (SCT) y el gobierno de Belice mantuvieron un encuentro en el que se reformaron las normas para el cruce fronterizo de camiones de carga, así como las medidas de seguridad aplicables para el pasaje de personas.
En la reunión se estableció que todo automóvil que ingrese a suelo mexicano deberá contar con seguro, además se acordó que ambos gobiernos mantendrán un intercambio constante de información respecto a las licencias de manejo de sus ciudadanos, con el fin de reconocer si la persona interesada en cruzar la frontera tiene en norma sus documentos.
Otro de los punto discutido hace referencia al establecimiento de una terminal específica en Chetumal, Quintana Roo destinada únicamente a los autobuses de pasajeros beliceños.
Como consecuencia de dichos acuerdos, algunas de las agencias de transporte del país vecino informaron que sus autobuses dejarán de ingresar a Chetumal e informaron que aquellos pasajeros que quisieran llegar a la ciudad quintanarroense tendrían que buscar transportación mexicana desde la frontera de Santa Elena.
Lo que provocó una disminución de ciudadanos beliceños cruzando a nuestro país, que de acuerdo al diario Novedades de Quintana Roo, en condiciones normales, diariamente un número de mil personas se registran en la frontera mexicana y se dirigen con dirección a Chetumal.
Los comerciantes mexicanos ubicados en el mercado Lázaro Cárdenas, donde se ubica el actual paradero que se pretende remover, informaron que sus ventas han disminuido hasta 70 por ciento desde el anuncio de una nueva terminal.
Se espera que el nuevo espacio albergue mejores servicios de sanitarios, cuente con sombra, casa de cambio y un módulo de información turística.
