El Grupo Aldesa, que construyó el Paso Exprés en Cuernavaca y donde se registró un socavón que provocó la muerte de dos personas, es acusada de mantener un adeudo de 90 millones de pesos con empresas que le apoyaron en obras de la planta Audi.
Entre las afectadas que son alrededor de 13, se encuentra la empresa poblana Industrial de Aceros y Construcciones (Iacsa) que tiene más de un año reclamando el pago de 9 millones 798 mil 944.98 pesos, pero que el 8 de mayo pasado presentó la demanda por incumplimiento de contrato ante el Juez Décimo Séptimo de lo Civil, con número de expediente 330/2017.
Israel Vera Merino, gerente administrativo de la firma, explicó a Ángulo 7, detalló que fueron subcontratados por Aldesa para hacer estructuras metálicas de tres naves –MDK, A62 y A87-, tres puentes del Spine, que es el área donde Audi tiene la logística, además de trabajos adicionales, todo esto desde mayo de 2015 a julio de 2016.
Explicó que establecieron contratos por 48 millones 168 mil 554. 46 pesos, pero sólo les pagaron 38 millones 369 mil 600.4 pesos, por lo que quedó pendiente la cantidad de 9 millones 798 mil 944.98 pesos.
Refirió que el último pago realizado por la incumplida, que tiene oficinas en la Ciudad de México, fue el 26 de abril del año pasado.
Ante esa situación, recordó que los empresarios afectados y obreros participantes de las obras realizaron dos paros en protesta, las cuales se realizaron el 13 de julio y el 18 de agosto del año pasado, es decir, un mes antes de que fuera inaugurada la planta en forma oficial.
Posteriormente, Aldesa pidió a los constructores inconformes negociar con cada uno, ofreciendo liquidar los saldos pendientes, pero solo cubriendo el 30 por ciento del total, con el argumento de que Audi les quedó a deber.
Sin embargo, Iacsa rechazó y decidió proceder por la vía legal tras recibir evasivas a cumplir los contratos.
Vera Merino mencionó que destinaron 82 trabajadores a las obras correspondientes a la planta alemana.
Audi, los deja solos
Incluso, señaló que Audi en su momento ofreció intervenir para presionar a Aldesa para que les pagara a las subcontratadas, con la retención de los pagos, sin embargo al poco tiempo de ser inaugurada la planta armadora, los directivos de la misma se deslindaron al decir que se habían liquidado al 100 por ciento las obras, con ello prácticamente dejándolos solos en el problema.
Iacsa dijo que el modus operandi de la constructora consiste en cambiar constantemente a los residentes y supervisores para no hacerse responsables de trabajos anteriores y no firmar las actas de recepción de la obra, dificultando y haciendo casi imposible la cobranza.
