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¿Cuántos votos podría restarle Eduardo Rivera a la esposa de Moreno Valle?

Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, señala que entre algunos operadores panistas de la capital del estado es creciente la preocupación por el crecimiento electoral de Morena y el riesgo de que el PAN pueda perder localmente los comicios de 2018 por los conflictos y fracturas internas. Creen que los morenovallistas no han medido o calculado en su justa dimensión las consecuencias políticas y electorales de la inhabilitación y sanción al ex presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez.

Basan su inquietud en los resultados de la última elección de gobernador, la de 2016, en la que una ex panista —Ana Teresa Aranda Orozco— obtuvo más sufragios que el PRD en toda la entidad y el municipio de Puebla, a pesar de que sólo era conocida por menos del 30% de los ciudadanos con derecho a votar.

Advierten que si Ana Teresa logró como candidata independiente más de 74 mil votos en el estado y más de 41 mil en la capital, Eduardo Rivera y otros panistas inconformes con el ex gobernador Rafael Moreno Valle y su esposa Martha Erika Alonso Hidalgo podrían hacerle al PAN un hoyo electoral mayor, en 2018.

Estos panistas quizás no te hagan ganar, pero sí te hacen perder, sobre todo en el escenario de una contienda electoral cerrada, ya sea con Morena o el PRI, o con ambos partidos a la vez.

Si Eduardo Rivera y otros panistas que han sido marginados o excluidos de la administración pública estatal o municipal, de los órganos de dirección del PAN y de la posibilidad de obtener una candidatura a un cargo de elección popular, optaran por no respaldar la candidatura al gobierno del estado de Martha Erika Alonso o de Jorge Aguilar Chedraui a la alcaldía poblana, el riesgo de que ambos pierdan no es menor.

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Líder sindical hace sombra a Doger y Zepeda, víctima de robo

La columna De boca en boca, publicada en Ángulo 7, indica que al parecer es más querido entre los trabajadores del IMSS en Puebla, el líder sindical Francisco Javier Torres Zenteno, que el propio titular de la delegación, Enrique Doger Guerrero, quien tiene más de un año al frente de la misma.

Lo anterior, se notó el pasado miércoles cuando ambos personajes acudieron a la inauguración de los elevadores del Hospital General número 20 ubicado en la unidad habitacional de La Margarita.

Y es que al momento de la presentación de los asistentes, primero fue nombrado Torres Zenteno, secretario General de la Sección 1 del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social, mismo que fue ovacionado por el grupo de personas que asistieron, cuyo número no pasaba de 30.

Mientras que Doger Guerrero, que fue el último en ser presentado, aunque también le aplaudieron, sólo lo hicieron unas cuantas personas, aunque ambos funcionarios llegaron juntos al evento, dando muestra de la “buena” relación que hay entre ellos.

– Los regidores panistas de Puebla que fueron acusados de deber cuotas partidistas afirmaron que seguirán sin pagarlas, pues el líder municipal del PAN, Pablo Rodríguez Regordosa, no les ha rendido cuentas y temen que el dinero del partido haya sido utilizado para financiar la gira del exgobernador Rafael Moreno Valle por todo el país.

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Derbez deja la UDLAP

Jorge Rodríguez en su columna A Puerta Cerrada, publicada en El Sol de Puebla, señala que justo un año atrás, en julio de 2016, Luis Ernesto Derbez Bautista acaparaba espacios en medios de comunicación con una declaración poco convencional.

En su calidad de militante panista y ex secretario del gobierno federal en dos ocasiones, Derbez proponía una alianza partidista entre el PAN y el PRI para encarar la elección presidencial de 2018.

De alguna manera, sugería formalizar la sociedad que algunos panistas pretendían llevar a cabo con el PRI de Enrique Peña Nieto para impedir una eventual victoria de Andrés Manuel López Obrador.

Sin mencionar al fundador y dueño de Morena, Derbez argumentaba que la unidad del panismo con el priismo, legalizada a través de una alianza electoral, aseguraría la estabilidad política del país.

Así dijo:

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Crecen los malos augurios para RMV

Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, indica que las cosas no marchan nada bien para Moreno Valle ni en el PRD; y es que durante la visita de Juan Zepeda a Puebla, los representantes de Nueva Izquierda, encabezados por Arturo Loyola González, Carlos Martínez Amador, Julián Rendón Tapia, se reunieron con quien podría ser el candidato del sol azteca a la Presidencia.

Hay que señalar que los nombres de estos perredistas tienen todo, menos lealtad, y son capaces de apoyar a quien mejor les hable al oído y a sus intereses.

La comida que se llevó a cabo en la Casa de los Muñecos, muestra que la gente de Nueva Izquierda ve cada vez más lejana la candidatura de Moreno Valle, por lo que le urge rescatar algunas posiciones plurinominales en caso de que no se dé la alianza con Acción Nacional.

Conforme se acerque el 2018 veremos cómo estos personajes irán abandonando el barco morenovallista, con la pérdida del control del PRD estatal, al igual que le podría suceder con Acción Nacional.

Aunque estos personajes son cuestionados por su camaleónico historial y su naturaleza traicionera, sin embargo, es innegable que aún mantienen una fuerza al interior del PRD y ésta no debe menospreciarse.

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Regresa Banck a la senda de usar PPS; pediría uno de 2 mil mdp para mejorar seguridad pública

Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, señala que regresa el fantasma de los llamados Proyectos de Prestación de Servicios (PPS), pues se dice que este día el cabildo de la ciudad de Puebla –por petición del alcalde Luis Banck Serrato– podría aprobar un PPS de unos 2 mil millones de pesos, que se utilizarían principalmente para mejorar la seguridad pública en la capital. Lo relevante de este asunto no es preguntarse en qué se va a emplear ese dinero, sino en analizar el impacto que dicho pasivo podría tener en las finanzas del gobierno municipal, ya que si realmente se acepta dicho recurso significaría que se quintuplique la deuda pública de la Angelópolis.

Fuentes bien informadas del ayuntamiento sostienen que este día, alrededor de las 14 horas, va a ser convocada una sesión extraordinaria de cabildo, en donde el único punto a tratar es la propuesta de que se apruebe un PPS por un monto de alrededor de 2 mil millones de pesos. La justificación que se utilizará es que urge aumentar la inversión en seguridad pública para frenar la ola delictiva que azota a la capital del estado.

Sin duda es apremiante que se adopten medidas drásticas para atender el clima delictivo de Puebla, que es el más grave en muchas décadas, pues el gobierno de la capital no tiene la capacidad para enfrentarlo al carecer de suficientes policías, patrullas, de equipos tecnológicos, armas e infraestructura.

No obstante habría que preguntarse si la ruta de emplear un PPS es la mejor opción, ya que podría significar que se resuelva un problema, pero se detone una contrariedad futura con efectos muy negativos.

La actual deuda pública del gobierno de la ciudad de Puebla es de aproximadamente 400 millones de pesos. Por tanto, si se adquiere un pasivo de 2 mil millones de pesos, por el PPS antes mencionado, significaría un incremento de cinco veces el endeudamiento.

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Los mequetrefes que atacan el nuevo Sistema de Justicia Penal

Arturo Rueda en su columna Tiempos de Nigromante, publicada en Diario Cambio, indica que el debate sobre la operatividad del Nuevo Sistema de Justicia Penal y sus consecuencias criminales en las calles es muestra del subdesarrollo de la clase política mexicana. Los mismos diputados, senadores y gobernadores que en 2008 aprobaron la nueva modalidad, nueve años después piden a gritos una contrarreforma pese a que tuvieron ese larguísimo plazo para prepararse, capacitar a jueces, ministerios públicos y concientizar a la ciudadanía de lo que se avecinaba.

Un año después de su entrada total en vigor —hubo distintas fases en esos ocho años—, el debate impuesto por la Conferencia de gobernadores con forma de linchamiento mediático se vincula con el catálogo de delitos que merecen prisión preventiva de forma oficiosa. Se trata, sin embargo, de un falso debate provocado por su ignorancia jurídica, pero también su pobreza del idioma español: simplemente no saben leer… o se hacen.

Cuando el artículo 19 establece que “El juez ordenará la prisión preventiva, oficiosamente en los casos de delincuencia organizada, homicidio doloso, violación, secuestro, trata de personas, delitos cometidos con medios violentos como armas y explosivos, así como delitos graves que determine la ley en contra de la seguridad de la nación, el libre desarrollo de la personalidad y de la salud” está estableciendo un catálogo enunciativo mas no limitativo, es decir, reenvía al Código Penal Nacional para definir los demás delitos.

Por si fuera poco, el siguiente párrafo del artículo 19 lo aclara todo: “La ley determinará los casos en los cuales el juez podrá revocar la libertad de los individuos vinculados a proceso”. Esto es, delitos en los que por la gravedad de su comisión pese a que no estén incluidos en el catálogo de prisión preventiva oficiosa, el Juez de Control puede imponerla al supuesto delincuente como medida cautelar.

En efecto: el objetivo del Nuevo Sistema de Justicia Penal es que los imputados de cometer un delito pueden llevar a cabo su proceso en libertad, a diferencia del anterior en el que casi todos se quedaban en los penales provocando una sobrepoblación carcelaria, pero además, haciendo nulo el principio garantista de la presunción de inocencia.

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Las Mentiras de Arturo Rueda y su Periodismo Perjudicial

Mario Alberto Mejía en su columna La Quinta Columna, publicada en 24 Horas Puebla, señala que dos meses tardó Arturo Rueda en responder un reportaje que el quintacolumnista publicó el viernes 12 de mayo sobre un tema que no lo deja dormir en paz: un violento enfrentamiento entre militares y miembros de una banda de huachicoleros.

Todo un récord.

El problema es que, fiel a su estilo, respondió como le gusta: con insultos, verdades a medias y mentiras absolutas.

Con la prosa porosa de los leguleyos (ya se sabe: errores de dedo, mediana redacción, lugares comunes), Rueda pretende desmentirme, además, en temas que jamás cuestioné.

Lo peor es que recurre a parches jurídicos y falsedades para dictar cátedra de “periodismo judicial”.

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