Organizaciones y académicos coincidieron que en Puebla hace falta una ley que proteja los recursos naturales y el maíz nativo de las semillas extranjeras y transgénicas, por lo que exigieron que se legisle antes de que las especies desaparezcan.
Al año, México importa -principalmente de Estados Unidos- 100 mil toneladas de maíz, mientras que en territorio nacional no se producen más de 40 mil, lo cual es un indicador de que cada vez más se descuida la agricultura local, abonando así a la desaparición de las semillas criollas de nuestro país.
Así lo señalaron integrantes de organizaciones civiles, campesinas y ecologistas en la clausura del “Taller sobre legislación ambiental”, el cual tuvo como objetivo analizar las debilidades jurídicas de México en esta materia, así como generar propuestas para la creación de leyes.
En su ponencia “La defensa y preservación de los maíces nativos”, Cornelio Hernández, organizador de la fiesta del maíz de Ixtenco, Tlaxcala, señaló que solo en la región centro del país, de la que forma parte la entidad poblana, actualmente existen más de 60 especies de maíz, de las cuales solo se cultivan de manera comercial alrededor de diez, mientras que el resto solo son para autoconsumo de los agricultores.
Ya desaparecieron 30 especies
Esto provoca que de manera gradual las semillas vayan desapareciendo hasta que solo queda el registro de que en algún momento existieron, como “ya ocurrió” con al menos 30 que se estima que se extinguieron en los últimos 200 años.
Por ello, urgió a los gobiernos estatales y federal a que “defiendan” el maíz nativo, se apoye la agricultura local y se establezca un límite y regulación a la entrada de semillas extranjeras, así como prohibir las genéticamente modificadas, es decir, los transgénicos.
El origen de la palabra maíz es de la cultura otomangue y no nahua que significa “fuente de vida” o “sustento de vida”.
En el evento también se proyectó el documental “La abogada del pueblo”, que relata la historia de Concepción Hernández Méndez, mujer indígena originaria de Tehuacán, quien estudió Derecho y decidió usar sus conocimientos para apoyar a campesinos de la Sierra Norte de Puebla y Veracruz en la defensa del territorio frente a megaproyectos como minas o hidroeléctricas.
Cabe mencionar que la fiesta del maíz de Ixtenco, Tlaxcala, se ha llevado a cabo los últimos 8 años. En tanto, pese a que Coxcatlán, Puebla, es el lugar de origen del maíz, en ninguna parte del territorio estatal se realiza una feria del maíz.