La Asociación Mexicana de Proveedores de Estaciones de Servicio (AMPES) puntualizó que la alteración de dispensarios para vender litros incompletos de combustibles es responsabilidad de los dueños.
Maura Arredondo, gerente de la agrupación que tiene 52 socios, señaló que los equipos están calibrados con el software que marcan las autoridades, por lo que cada gasolinero asume el riesgo si los manipula para su conveniencia.
Explicó que entre los miembros hay 14 que comercializan entre el 70 y 80 por ciento de los equipos, por lo que “en teoría los sistemas volumétricos no deben ser vulnerables, sin embargo, puede haber quien lo haga, con el riesgo de que sean sorprendidos y clausurados por la Profeco o el SAT”.
Indicó que los programas de los dispensarios son supervisados por las autoridades para evitar que haya un perjuicio contra los consumidores, sin embargo desconoció cómo se llega a dar la alteración de los mismos.
Sin embargo, dijo, hay una inspección constante a las estaciones, en las que ahora la Comisión Reguladora de Energía (CRE) tiene una participación clave para autorizar estaciones nuevas o que se hagan las clausuras.
Reforma energética podría afectar
Por otro lado, comentó que a raíz de la reforma energética que permitirá la apertura de estaciones de servicio a empresas extranjeras en territorio nacional, les preocupa a los proveedores que se vean reducidas las ventas de equipos.
Comentó que en el mercado nacional son conocidas las empresas afiliadas a la AMPES, algunas de las cuales ofrecen equipos importados, “pero no descartamos que en la instalación de nuevas gasolineras se surtan con equipos traídos por los inversionistas de otros países”.
Indicó que ese tema sí tiene inquieto a su sector, el cual hizo un llamado al gobierno federal que garantice la proveeduría local, pues se ponen en riesgos empleos.
Comentó que el robo de combustible en Puebla puede afectarlos en que bajen las ventas de equipos, al ser frenadas las intenciones de empresarios por abrir nuevas estaciones o reemplazar dispensarios viejos.
