Tras los enfrentamientos pasados entre el Ejército y huachicoleros, el Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría, de la Ibero Puebla, exigió la presencia de la CNDH en el Triángulo Rojo porque militares “hacen uso excesivo de la fuerza”.
Lamentó las imágenes que circulan en diversos medios donde se aprecia como un militar dispara en la cabeza a un supuesto huachicolero que se encontraba sometido en el suelo.
Debido a lo anterior, demandó al gobierno estatal de Puebla establecer estrategias con autoridades municipales y federales, así como diseñar políticas criminales para combatir el robo de combustible.
Asimismo, el Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría (Idhie) pidió a la Procuraduría General de la República (PGR) investigar los hechos ocurridos durante los operativos realizado por el Ejército en el Triángulo Rojo.
“El uso de la fuerza en el marco de las funciones policiales y de seguridad pública, no son propias del Ejército”, indicó.
Por su parte, el relator especial sobre las ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias, Christof Heyns, realizó una visita a México, donde detalló que “el principal objetivo de un cuerpo militar es someter al enemigo valiéndose de la superioridad de su fuerza”.
Precisó que dentro de un enfoque de derechos humanos sólo se contempla el uso de la fuerza como último recurso.
Es de señalar que en 1998, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, expresó su preocupación sobre la intervención del Ejército en funciones propias de la policía, argumentando que se confunde la seguridad pública con la nacional.
Concluyeron que era necesario “mantener las fuerzas armadas en el rol propio para el cual fueron creadas”.
Cabe mencionar que el 10 de mayo circuló un video en el que un elemento de la policía militar ejecutó a quemarropa a un hombre que se encontraba retenido y tirado en la calle, durante un operativo en la junta auxiliar de Palmarito Tochapan, Quecholac.