La excandidata independiente, Ana Teresa Aranda Orozco, señaló que la exoneración a los consejeros del IEE de Puebla por Tepjf es una señal de alerta de lo que podría ocurrir en el 2018, pues no se ha garantizado la equidad en las contiendas.
En entrevista, indicó que los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (Tepjf) “se han quedado cortos” en la mayoría de los temas que les han llegado; no obstante, confió en que corrijan el camino, pues son la última instancia de defensa.
Y es que, comentó que uno de los argumentos del tribunal federal para mantener en su cargo a los consejeros electorales es que los agravios fueron reparados con los juicios de protección de derechos que se interpusieron, lo que –aseveró– no es una justificación.
Refirió que los integrantes del Consejo General del Instituto Electoral del Estado (IEE) conducirán el proceso electoral de 2017-2018, por lo que “si las cosas siguen como están, lo único que vamos a tener es una elección en donde puedan hacer lo que quieran porque al cabo ya saben el camino (…) nos podemos esperar cualquier cosa, porque saben que la pueden hacer y que no van a pagar”.
Consideró que la actuación del Consejo Nacional del Instituto Nacional Electoral (INE) superó la del tribunal, pues la resolución establece la “falta de cuidado” por parte de los funcionarios electorales locales, lo que –dijo—significa que no están preparados para asumir la responsabilidad que se les confirió, aunque no calificó el “dolo” con que actuaron.
Por lo anterior, manifestó su preocupación y señaló que los males “más grandes” de México son la corrupción y la impunidad, e indicó que la primera no solo es robarse el dinero, sino también corromper para que organismos no cumplan con su cumplir con la funciones; dichas situaciones, acotó, lleva a los ciudadanos a alejarse de la política.
Cabe mencionar que la Sala Superior del Tepjf decidió no destituir a los consejeros electorales del IEE de Puebla al señalar que no hubo “descuido e ineptitud” en sus acuerdos; además desestimó los agravios señalados por PRI, Morena, PRD y Ana Teresa Aranda Orozco.
