Francisco Sánchez/Intolerancia Diario
Lobos en perreras, tigres en diminutas jaulas, conejo herido, serruchos tirados, gansos que atacan a los visitantes, un escenario deprimente con lonas viejas y piso sucio, son las características del llamado Club de los Animalitos de Tehuacán, propiedad del diputado federal panista, Sergio Gómez Olivier, mientras organizaciones protectoras de los animales han pedido a las autoridades el cierre definitivo del sitio.
Fotogalería
A pesar de que hace 2 años el exgobernador, Rafael Moreno Valle Rosas, presuntamente, intervino para que se mantuviera un parque zoológico en Tehuacán, ante la clausura que efectuó la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en marzo de 2015, se ofreció financiamiento público para la reubicación a instalaciones adecuadas, pero los animales no han tenido mejoras en sus condiciones de vida, ya que los espacios que ocupan son reducidos.
Intolerancia Diario realizó un segundo recorrido por el lugar a 3 años y medio de la primera publicación sobre el lugar, y de acuerdo con las imágenes recabadas las condiciones del sitio son similares a las de entonces.
El zoológico, ubicado en la Prolongación 1 Poniente, número 1120, Fraccionamiento Arcadia 2, en Tehuacán, a menos de un kilómetro del centro de la ciudad, y en medio de una colonia residencial, genera malos olores que llegan al Jardín de Niños “Guatemala”, que se encuentra frente a las instalaciones.
La construcción improvisada con láminas galvanizadas o de fibra de vidrio incrementan el calor en primavera y verano en las jaulas verdes, a las cuales ya les pusieron candados y la leyenda “Prohibido Meter las Manos”, pero en cualquier descuido un menor de edad lo puede hacer fácilmente, pues no existe una barrera de protección.
El maltrato animal
Tal es el ejemplo de una osa grizzly que fue donada por el Circo Ruso de Moscú, la cual habita en una jaula con pequeño espacio. También, un emú muestra su piel al descubierto al buscar refugio en al algún lugar, pero estar bajo el techo de lámina de metal es peor que soportar los rayos del sol.
Mientras una avestruz debe soportar lo caliente del suelo de cemento, cualquier visitante le da de comer lo que sea. Un tigre blanco se encuentra encerrado en un espacio de apenas un 1 de ancho por 3 de fondo; tiene problemas para dar la vuelta, cuando lo hace su piel roza los barrotes oxidados de la jaula.
Por los pasillos del lugar un conejo con la oreja herida se detiene frente a los visitantes en espera de que le den la zanahoria que ahí venden.
La minijaula
A pesar de que el diputado federal panista refutó los señalamientos de que un tigre de Bengala se encontraba en una jaula de un metro de ancho, nuevamente se apreció un ejemplar de esa especie en espacio similar, sin posibilidad de un movimiento libre.
Además el alimento para todas las especies salvajes que ahí se encuentran es pollo, y algunos trozos, incluso, despedían mal olor.
Lobos en perrera
En el lugar se encuentran 2 lobos mexicanos, especie en peligro de extinción; la jaula cuenta con las características de una gran perrera, sin que haya algo que les permita una distracción, como ocurre en cualquier parque zoológico reconocido.
Sin reconocimiento
La Asociación de Zoológicos y Criaderos de Animales de México informó que no tiene entre sus miembros a este sitio. Esta agrupación, donde se encuentran los principales centros de conservación de la vida salvaje en el país, no puede hacer recomendaciones de manera directa, pues tendrían que ser las autoridades federales –en el caso de los animales– o Protección Civil municipal y estatal las que adopten medidas, una vez que no se cumplen con las mínimas medidas de seguridad.
Por la clausura definitiva
La organización Justicia y Dignidad Animal ha reunido firmas para el cierre definitivo y en la página web: http://www.change.org/p/guillermo-haro-exigimos-el-cierre-del-zool%C3%B3gico-el-club-de-los-animalitos-de-tehuac%C3%A1n-puebla
De esta manera se han filtrado imágenes de algunos especímenes, reclamando a la Profepa y a la Semarnat que no se haya clausurado el lugar.
“El 23 de febrero de 2015 la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) aseguró un total de 101 animales a la Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA) denominada ‘Club de los Animalitos’, entre los que destacan 40 grandes carnívoros, por hacinamiento y faltas al trato digno”.
Entre tanto, se subraya: “Además, el 29 de marzo del 2015, Profepa clausura las actividades del zoológico por dos años. Sanción que tampoco llegó a cumplirse, pues el 23 de marzo del 2016 se retiran los sellos y se reanudan las actividades, con el compromiso de abrir un nuevo zoológico con ‘mejores condiciones’ en 35 meses”.
La posición oficial
En un comunicado de prensa la Profepa informó que el proyecto del nuevo zoológico cuenta con el aval y compromiso de inversión del gobierno del estado de Puebla, el cual a finales de 2016 presentó la descripción y arquitectura del mismo, y que se ubicará en una superficie de aproximada de 20 mil metros cuadrados dentro del ejido Santa María Coapán, en Tehuacán, Puebla.
También, respondiendo a los cuestionamientos sobre la suspensión temporal de actividades del citado Club de los Animalitos, la medida fue levantada el pasado 23 de marzo de 2016, un año posterior a su aplicación, considerando las distintas acciones implementadas por el particular para mejorar:
a) El ofrecimiento y compromiso del inspeccionado y del gobierno del estado de Puebla para la construcción de un nuevo zoológico.
b) La habilitación de un área de resguardo temporal, con el fin de reducir el hacinamiento de la colección, la cual cuenta con 11 albergues y 2 corrales en una superficie de 3 mil 500 metros cuadrados.
En conclusión, esta autoridad considera que hay avances importantes para lograr la clausura definitiva de ‘El Club de los Animalitos’ (…) Asimismo, se mantendrá el seguimiento puntual con el gobierno estatal y el inspeccionado a fin de que se llegue a buen término la construcción del nuevo zoológico”, se indicó.