Sin invertir un peso, Tlaxcala ha aprovechado más que Puebla los empleos que genera Audi, ya que vende a precios “adecuados” los terrenos aledaños a la planta armadora para que empresas se instalen, a diferencia de Puebla “donde se busca hacer negocio”.
Así lo señaló el líder del CCE Puebla, Carlos Montiel Solana, quien dijo que lo anterior está “dentro de la ley”, lamentó que en la entidad poblana “no se pueda” atraer más inversiones porque los recursos destinados para ello “se apostaron” por completo a la firma alemana.
En entrevista, luego de acudir al izamiento de bandera encabezado por funcionarios estatales, reconoció que el estado vecino “está haciendo su chamba” al atraer empresas a la zona circundante de Audi y sacar provecho del que fue el principal proyecto de la pasada administración de Rafael Moreno Valle.
Lo anterior, explicó el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) Pueblas, debido a que se ha beneficiado de su ubicación geográfica, pues varios municipios tlaxcaltecas son circundantes a la armadora.
Puebla no se ocupa en atraer inversión
Aunado a ello, señaló que el gobierno estatal de Tlaxcala ha dedicado programas y recursos para atraer fuentes de empleo, cosa que en Puebla “no está sucediendo”, ya que sólo esta intentando “inflar” los precios de dichos terrenos.
No detalló cuántas son las empresas que han elegido migrar al estado vecino ni cuántos empleos se habrían dejado de generar por este fenómeno, pero afirmó que es algo que se debería “revertir”, a fin de que sea Puebla quien aproveche los beneficios de la armadora, pues el gobierno estatal fue quien le dio la facilidad para instalarse.
Es así que refirió que el gobierno poblano debería atraer inversiones promoviendo “las ventajas y beneficios” de la entidad.
“Aunque ya no tengamos recursos, hay que utilizar las ventajas de Puebla para que las empresas decían quedarse aquí”, apuntó.
Y es que además admitió que la inversión privada local sufrió pérdidas en el primer bimestre del año, principalmente por los incrementos a los precios de los combustibles y la depreciación del peso frente al dólar.
Habría recesión económica
No supo precisar en qué porcentaje se vieron afectadas las empresas, pero aseguró que tras el “gasolinazo” del 1 de enero los costos operativos y de transporte del sector industrial y comercial aumentaron hasta en un 10 por ciento.
Advirtió que “si la presión social no hubiera detenido el aumento del 17 de febrero” las pérdidas del sector privado habrían llegado a ser “preocupantes”.
Es por eso que enfatizó que el panorama económico para la entidad y para el país “no es prometedor”, ya que es muy probable que la inflación siga en aumento al igual que la desaceleración económica.
Incluso, refirió que la consultora Moody’s advirtió en un estudio publicado el fin de semana que México podría enfrentar una recesión económica debido al conglomerado de circunstancias que enfrenta.
