José Ramón Cossío Díaz, ministro de la SCJN, señaló que hace falta un mayor análisis sobre el derecho humano al agua, donde la norma no solo sea ideológica sino funcional, así como reflexione sobre su garantía para los diferentes sectores.
Lo anterior, tras cuestionarle sobre si la controversia constitucional que presentó el alcalde de San Pedro Cholula, José Juan Espinosa Torres, sobre la reforma al artículo 12 de la Constitución local procedería, de lo cual –dijo– qué tendría que analizar más el tema para dar su punto de vista.
Explicó que, por un lado, hay una fuerte tradición formalista o posivista del derecho, donde la norma no se cuestiona, pero, por el otro, se genera un discurso ideológico, donde lo escrito solo se queda en un ideal. Pero “hasta dónde alcanza y cómo garantizarlo”, son preguntas –dijo– que se deben responder a través del análisis y consenso social, así como de la reflexión jurídica.
El ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) indicó que se debe hacer ciencia jurídica para definir el tamaño del derecho del agua.
“Es bien complicado porque nosotros en la Corte no tenemos que estar haciendo ciencia jurídica; debiéramos tomar ciencia jurídica de buena calidad y ponerla en las sentencias y resolver conflictos (…) . Pero hay déficit importante en la construcción de los derechos humanos. Yo tengo derecho al agua, vivo en la Sierra: ¿tengo derecho a que me pongan un tubo para que me lleve (agua) ?”, dijo.
Refirió que de acuerdo artículo 4 constitucional, todos tienen el derecho humano al agua; sin embargo, no se ha encontrado en la literatura jurídica del país ejercicios de construcción de los derechos de forma operativa en cuanto a quién, por qué y la forma de suministrar el agua.
Sólo se tiene una condición ideológica
Cossío Díaz puntualizó que no se han podido convertir a los derechos en instrumentos y tampoco se les ha podido dar una condición funcional, pero sí una condición ideológica, que no está mal, pero que ello no se debe quedar ahí, pues se trata en un discurso “muy complaciente” que no transforma realidades.
“Muy bien, yo tengo derecho al agua, pero vivo en la sierra a varios kilómetros de la más cercana población, ¿Tengo yo derecho a que me pongan un tubo para que me lleven agua a mí solito? ¿De ese tamaño es mi derecho? ¿Y qué pasa si no me llega el agua? y eso no es solo en el tema del agua, sino en la totalidad de los derechos”, cuestionó.
Lo anterior, tras haber encabezado la presentación del doctorado en Investigación Jurídica en la universidad Iberoamericana de Puebla, el cual dará inicio en agosto y constará de cinco semestres, para el cual los aspirantes deberán presentar un bosquejo en cuanto a un problema de investigación.
Sobre el doctorado el ministro de la SCJN comentó que propone realizar investigaciones enfocadas hacia los problemas de la realidad, a través de la elaboración de preguntas y respuestas innovadoras utilizando nuevos métodos y herramientas de investigación que busquen lograr el establecimiento de un Estado de Derecho más ordenado.
