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Martín Hernández Alcántara/La Jornada de Oriente

Los puentes viales y ciclopistas, como la que se construyó en la Vía Atlixcáyotl, además de los derroteros que se establecieron para la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA), han trastornado los desplazamientos de autos y son causa de embotellamientos severos en horas pico, ya que traslados que antes demoraban 20 minutos como máximo ahora tardan hasta una hora, advirtió la Asociación Ciudadana de Movilidad Sustentable (ACMS).

Samantha Perdomo Villanueva, vocal de la organización, señaló que, para remediar la situación, las autoridades deben hacer un estudio sobre el parque vehicular que hay en la capital poblana y la zona conurbada, amén de conocer los flujos de mayor densidad y establecer una efectiva sincronización de semáforos.

La ACMS es una organización con sede en Monterrey, Nuevo León, que tiene un lustro de existencia y se encarga de “analizar, monitorear y propiciar las mejores prácticas en movilidad urbana sustentable en todo el país”.

“Como asociación civil trabajamos en este momento monitoreando lo que sucede en las que consideramos las cinco principales capitales del país y sus zonas conurbadas, a saber: la Ciudad de México, Monterrey, Guadalajara, Puebla y, por su densidad y problemas de movilidad, Cuernavaca, Morelos”, apuntó la urbanista.

Explicó que en particular llamó la atención de la ACMS “la impresionante ola (sic) de obras realizadas durante el sexenio del gobernador Rafael Moreno Valle, que ciertamente han cambiado la apariencia de la ciudad de Puebla y su zona conurbada, pero que a nivel de eficiencia no parece tener los resultados esperados”.

Perdomo Villanueva señaló que es necesario “hacer estudios científicos sobre la afectación que ha tenido el tránsito en la zona de los puentes, pero nosotros hemos tenido trabajo de campo, observaciones empíricas y entrevistas con automovilistas, usuarios del transporte público, transeúntes, vecinos y conductores de taxis y vehículos y transporte público y podemos inferir que hay un severo trastorno a los viajes que se hacen en toda la ciudad, sobre todo en la zona donde se edificaron más obras, que es la zona sur”.

El problema de RUTA
La especialista acotó que los resultados de las indagatorias científicas y el trabajo empírico se conocerán a finales del próximo mes de abril, “pero podemos dar un adelanto en una obra que, creo, no admitirá controversia sobre las afectaciones que ha tenido para una gran parte del territorio de la ciudad de Puebla y la zona conurbada: la RUTA”.

La urbanista explicó que los derroteros establecidos tanto para las líneas 1 y 2 de RUTA “prácticamente clausuraron largos tramos para transitar de manera perpendicular en bulevares sumamente importantes, por ejemplo, el de la 11 Norte–Sur y el de la avenida Diagonal; por esa razón los flujos vehiculares son ahora más densos y los embotellamientos se han desplazado de manera muy importante en las calles perpendiculares, las cuales por su tamaño no están diseñadas para tener tanta masa de automóviles en un solo momento, como las horas pico”.

Ejemplificó: “Una calle como la 17 Oriente–Poniente está calculada para tener a lo sumo entre 20 y 22 autos al mismo tiempo en sus dos carriles, por cada tramo perpendicular. Ahora que la 11 Sur no permite las tradicionales vueltas en ‘u’, nosotros llegamos a contabilizar una saturación en hora pico de hasta 27 automóviles. Si a esto le agregamos que los semáforos tienen la misma sincronización de siempre, menos de un minuto o minuto 10 a lo sumo, resulta en que no todos los automóviles pueden circular a la otra calle e invaden las avenidas perpendiculares, porque los conductores no suelen tener mucha urbanidad y por desesperación invaden las calles perpendiculares cuando no deberían ni avanzar. Es así como se generan los embotellamientos”.

Las ciclopistas
“Aunque no lo parece, también las ciclovías pueden ser un factor de trastorno en el tránsito de los automotores”, apuntó Samantha Perdomo, porque en algunos tramos, como la que se construyó en el Periférico Ecológico, los tramos de banquetas y guarniciones tuvieron que ampliarse y eso supuso también un acotamiento de las avenidas, del asfalto para decirlo con más exactitud”.

La especialista se refirió entonces a los severos embotellamientos que suceden de las 7:20 a las 8:25 de la mañana en el Periférico, en el tramo que va de la 24 Sur hacia la autopista México Puebla. “Se hacen congestionamientos en la 24 sur, por las obras de un distribuidor vial que llevan más de dos años, pero también hay cuellos de botella (sic) en la zona del acceso a Lomas de Angelópolis”.

Suma la negligencia
La vocal de la Asociación Ciudadana de Movilidad Sustentable dijo que “también hay malas decisiones, que pueden parecer bien intencionadas por parte de la autoridad, pero que en realidad complican mucho las cosas. Por ejemplo está lo que sucede en el bulevar Margaritas, entre la 11 Sur y la avenida Nacional, porque ahí se establecen retenes de la Policía Municipal o de la Policía Vial y de los agentes de Seguridad Vial para revisar automóviles que les parecen sospechosos o requerir documentación a los conductores ¡en plena hora pico!, en la tarde, cuando la gente sale de sus trabajos o va por sus hijos a la escuela. ¡A quién se le ocurrió eso!”.

La urbanista dijo que se debe atacar el problema de fondo con una nueva semaforización e hizo alusión a un programa anunciado por el ayuntamiento de Puebla para hacer una sincronización efectiva de los semáforos.

“Eso es algo que va a ayudar mucho; que nosotros creemos que puede ser una parte de la solución, aunque la verdadera solución está en la disminución del parque vehicular y la optimización del transporte público”.

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