Pilar Pérez/El Sol de Puebla

Pagar deudas y tener ahorros será la función del aguinaldo de los poblanos este año pues durante 2016 –argumentaron- tuvieron una situación económica complicada, aunque otros más lo destinarán, como es costumbre, a la compra de la cena y los regalos de Navidad y Fin de Año.

Empleados de distintas empresas, tiendas comerciales y hasta servidores públicos saben que el aguinaldo se trata de una prestación que por ley les corresponde; sin embargo, varios de ellos opinan que es muy poco lo que reciben.

En un sondeo revelaron a El Sol de Puebla que lo ideal es destinar el aguinaldo al pago de las deudas, servicios médicos o comprar lo indispensable como ropa, zapatos y hasta solventar algunos gastos de la educación de sus hijos.

Otros, los menos, aseguran que no tienen deudas y “viven al día” por lo que será posible comprar algunos regalos, invertir más en la cena e incluso ahorrar un poco para atender necesidades futuras que bien pueden ser por cuestiones de salud o el pago de predial, agua o luz, según sea el caso.

Gerardo Madrid, quien es empleado en una tienda de electrónica, refirió que su aguinaldo lo va a invertir en ahorros, pero lo más importante es hacer una reconstrucción dental de su esposa lo que requiere de una importante inversión.

“Voy a pagarle a mi esposa una reconstrucción de su boca porque le voy a completar sus dientes, porque es una placa de varios dientes que le hace falta y la otra parte pues la vamos a guardar porque la situación está muy difícil”, añadió.

Otros como Carolina García y Gerardo Madrid opinaron que lo más importante es pagar las deudas que tienen como es el caso de algunas tarjetas de crédito o bien préstamos que solicitaron a lo largo de este año para solventar algunos de sus gastos.

Coincidieron que el dinero nunca es suficiente y el aguinaldo, dado que se trata de un porcentaje muy bajo que les proporcionan cada año, también tiene que alcanzar para pagar la cena de fin de año así como algunos regalos para la familia.

“Esto sirve para pagar la tarjeta de crédito, pero tampoco es suficiente, porque a veces ya no pagas lo que te prestaron de la tarjeta sino los intereses que te genera. Y también tenemos que cooperar con la cena comprar algunos regalos”, añadió.

Caso diferente es el de Santiago Sáenz, quien labora en una tienda de zapatos, y dijo no tener deudas por lo que “vive al día” de tal forma que destinará el pago de esta prestación a la compra de la cena de Navidad y también para tener algunos ahorros.

“Desgraciadamente no tenemos la costumbre de tener ahorros y pues tenemos que guardar, parte y parte. Parte para los gastos de temporada entre ellos la cena, comprarle la cena a la familia y poder ahorrar”, refirió.

Algo similar ocurre con Susana Varo, quien labora en una tienda de productos orgánicos. Ella se quejó por lo raquítico del aguinaldo, pero sostuvo que al no tener deudas que pagar, el principal uso que le dará a este recurso será sufragar las colegiaturas de las escuelas de sus hijos y tal vez comprarles ropa y zapatos.

Genaro Hernández y Juan N., quienes son servidores públicos, uno en el área del Servicio de Limpia y el otro en Seguridad Pública, expresaron –por separado- que la situación fue complicada este año, hablando económicamente por lo que las deudas son varias y elevadas, de tal forma que el dinero que reciban como aguinaldo lo invertirán en el pago de éstas.

Antonia Reyes ya recibió su aguinaldo y fue para la compra de su cena de fin de año, pues en estas fechas se reúnen todos los hermanos y hacen una especie de intercambio de regalos.

“Una parte ya lo destiné para mi cena y otra para ahorrar. Yo creo que algunas personas no guardan dinero para la cuesta de enero y otros sí porque con la situación que está ahorita, no está para despilfarrar”, refirió.

Dicha prestación fue creada con la intención de ayudar a los trabajadores a solventar gastos propios de la temporada navideña y que no se vieran en la necesidad de comprar con su salario todo lo que necesiten en estas fechas. Según lo estipulado en el Artículo 87 de la Ley Federal del Trabajo, deberá pagarse antes del 20 de diciembre de cada año.

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