Un grupo de 29 indocumentados de origen guatemalteco y salvadoreño, fueron interceptados y detenidos cuando viajaban a bordo de un microbús de la empresa Acapetlahuacan, en Izúcar de Matamoros, quienes buscaban llegar a la ciudad de Puebla.
El grupo conformado por 17 hombres, nueve mujeres y tres menores, quedaron al descubierto luego de que una llamada anónima alertara de la presencia de un grupo en actitud sospechosa.
Los centroamericanos fueron detenidos en la calle Morelos, por policías municipales y estatales, donde se encuentra un club rotario; junto con ellos fue detenido el chofer del autobús por su presunta complicidad, a pesar de que los inmigrantes aseguraron que el chofer no estaba involucrado.
Más tarde, tras ser entregados a la delegación estatal del Instituto Nacional de Migración (INM), aseguraron que llevaban varios meses viajando desde Centroamérica a fin de llegar a Estados Unidos.
