El presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, pagó 500 mil dólares al banco luego que la corte lo hallara culpable de haber tomado esa cantidad del erario para construir una alberca, un salón de visitas y un granero en su casa.
En marzo pasado, la oposición partidista llevó el caso a la corte pues detectaron que el mandatario hizo una serie de modificaciones a su casa ubicada en Nkandla, las cuales –según él- son “mejoras por seguridad”.
En múltiples ocasiones Zuma y su equipo de trabajo se negaron a cubrir el dinero sustraído una vez que se investigó que las renovaciones no fueron justificadas.
La oficina del presidente anunció que ha pagado de más a la Reserva Sudafricana y admitió que no hubo alguna excepción de pago debido a su cargo.
Los opositores solicitaron que se confirme que fue el propio mandatario, quien realizó el importe, lo anterior ante las sospechas de la adquisición de un préstamo con cargos al erario.
Editado por: Yoselin Ivette Gamez || @yoselin_ivette
