El programa “Zona 30” para delimitar, con señalética en el piso, el máximo de kilómetros a los que un vehículo puede circular en el centro es viable porque prioriza al peatón, pero para que sea funcional se debe de complementar con elementos urbanísticos.
En una rueda de prensa, José Antonio Sáenz de Miera Cuatlayol, urbanista del departamento de arquitectura del Itesm, indicó que para hacer reforzar el proyecto de “Zona 30” en el Centro Histórico se deben considerar el levantamiento del pavimento a la altura de la banqueta para que el peatón tenga la misma jerarquía que el automóvil.
Mencionó que también se deberían reducir los carriles del paso vehicular, pues con ello –refirió– los vehículos no sólo reducirían su velocidad, sino además dejarían de “dominar” las calles del primer cuadro de la ciudad.
Destacó que también se deben ensanchar las banquetas y las ciclopistas en el Centro Histórico para que el proyecto que pretende reducir la velocidad de los vehículos “realmente” cuide al peatón y usuarios de bicicletas.
“Hay una especie de colchones que parecen topes que se pueden poner cada 50 metros y reducir las velocidades de 50 kilómetros por hora a 30 (…) este proyecto sea implementado en España, en Nueva Zelanda, París, por lo que no estamos ante un proyecto piloto que pueda generar dificultades”, comentó.
Tomar en cuenta a las ONG
Mencionó que el promedio de circulación de los coches en Puebla es de 25 kilómetros por hora y el del trasporte público, de 17 kilómetros por hora y, con el proyecto, se busca que se acelere menos y por ello no se gaste tanto en combustible.
Por su parte, Alejandro Pérez Villaseñor, director de la carrera de Ingeniero Civil del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey Itesm, afirmó que una vez implementado este programa, las autoridades estatales deben abrirse al diálogo con organizaciones de la sociedad civil para hacerlas mejoras que vayan surgiendo.
En este sentido, reconoció que el ayuntamiento de Puebla ya está tomando en cuenta las recomendaciones del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo y de la Organización Mundial de la Salud para implementar la “Zona 30”.
Recordó que el programa abarcará hasta la avenida Manuel Espinosa Yglesias –al sur–; avenida Héroes de Nacozari –al norte–, la 11 sur –al poniente– y bulevar 5 de Mayo –al oriente–.
En tanto, Thalía González Cacho, urbanista del departamento de Arquitectura del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (Itesm), opinó que se trata del primer proyecto “congruente” que atiende demandas de movilidad.
