Luisa Tirzo/Diario Cambio
A un mes de la megafuga de crudo en los límites de Coronango y Cuautlancingo, Petróleos Mexicanos (Pemex) no ha limpiado en su totalidad los predios afectados ni ha indemnizado a los dueños de las cosechas que se perdieron o a quienes registraron daños en viviendas y en automóviles.
En un recorrido realizado por CAMBIO en la zona, se constató que con las lluvias de los últimos días, se han generado charcos mezclados con petróleo y lodo, provocando mal olor en comunidades cercanas como San Francisco Ocotlán.
Tanto en milpas como en antenas de alta tensión de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) es posible observar manchas de color negro, a pesar que en un reporte oficial de Petróleos Mexicanos, dio cuenta que ya había concluido hace una semana los trabajos en la zona.
Falta de limpieza genera alergias
En entrevista con vecinos del fraccionamiento Paseos del Roble, ubicado a 20 metros de los ductos, éstos denunciaron que el derrame en el lugar ha generado alergias además que el apeste, aunado a las náuseas y mareos provocadas persisten como si fuera el primer día.
Según algunos de los afectados, han gastado hasta 20 mil pesos para limpiar sus casas: cisternas, pozos de agua, albercas, techos, entre otros espacios.
En el caso de quienes tuvieron afectaciones en sus vehículos, han recurrido al cambio de pintura, reparación de calentadores solares, hospedaje, garrafones de agua, consultas y medicinas.
“Lo que más nos preocupa es la salud de sus familias, pues algunos siguen presentando molestias, tales como mareos, náuseas, diarrea y salpullido”, dijo Juan López, uno de los quejosos.
Un trámite engorroso para exigir indemnización
Hace una semana, un grupo de vecinos de Coronango se reunieron con personal de Pemex, a quienes exigieron la reparación del daño, pero algunos prefieren ya no iniciar con los trámites debido a que les solicitaron acudir a unas oficinas a Veracruz para esto.
Por ejemplo, Jonathan Martínez, quien ha erogado alrededor de 20 mil pesos para reparar su vehículo y bienes, indicó que no acudirá a exigir la indemnización pero exigió a Petróleos Mexicanos garantizar seguridad, pues bandas de chupaductoshan intensificado sus operativos de robo a los ductos que cruzan en la zona.
Entre los requisitos que la empresa solicita es que se compruebe con facturas o recibos los gastos realizados, y el dinero se reembolsaría en un lapso de cuatro meses.
El pasado 18 de julio, un derrame provocado por una toma clandestina provocó pánico entre habitantes de Coronango y Cuautlancingo, quienes abandonaron sus casas por temor a una explosión.
Viven en zona de alto riesgo
Uno de los argumentos que ha utilizado personal de Pemex para no indemnizar a afectados es que se ubican en una zona de alto riesgo, y que las autoridades municipales son responsables de haber otorgado los permisos de construcción cerca de los ductos.
En reuniones que han realizado los habitantes, también han planteado la posibilidad de organizarse para evitar que bandas dedicadas a “ordeñar” ductos de Pemex pongan en riesgo su vida.
Desde la Autopista Puebla-Tlaxcala, se observan las manchas negras en la zona, siendo predios de campesinos de la junta auxiliar San Francisco Ocotlán, Coronango, los más afectados.
CAMBIO buscó la versión de Pemex para conocer la fecha exacta en concluirán las labores limpieza, así como la cantidad programada para reparar los daños.
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