La segunda semana de julio pasado concluyó con una noticia muy significativa, en Brasil se llevó a cabo la operación policial, denominadaOperación Hashtag“, fue llevada a cabo por 130 policías en los estados de Amazonas, Ceará, Paraíba, Goiás, Minas Gerais, Río de Janeiro, Sao Paulo y Rio Grande do Sul. Sin embargo, lo anterior pareciera no importarle a nadie, y es que a unas horas para la inauguración de los Juegos Olímpicos de Río 2016.

El resultado de esta operación arrojó el arresto de 10 personas que pertenecían a “una supuesta célula terrorista, una primera célula, que pasó de mensajes sospechosos por internet a actos preparatorios de un supuesto atentado” según manifestaron las autoridades brasileñas en rueda de prensa.

Los detenidos, de nacionalidad brasileña, eran investigados desde abril y “participaban de un grupo denominado Defensores de la Sharia (ley islámica) y planificaban cometer crímenes en Brasil y hasta en el exterior”, sostuvo el ministerio de Justicia en un comunicado, precisando que: “algunos hicieron un juramento por internet” a la organización Estado Islámico.

Con información proporcionada por la Policía Federal de Brasil que monitoreó los mensajes de los ahora detenidos, los cuales se comunicaban vía Telegram y Whatsapp se supo que hubo un primer contacto con el Estado Islámico, existió un juramento por parte de los detenidos y que a continuación se llevaron a cabo una serie de actos preparatorios para realizar un acto terrorista en los Juegos Olímpicos.

Uno de los integrantes de este grupo habría entrado en contacto con un sitio web en Paraguay para comprar un rifle de asalto AK 47. Además, en sus conversaciones por redes sociales conmemoraron los recientes atentados de Niza (Francia) y Orlando (EU).

Sin embargo las autoridades brasileñas hacen unas declaraciones nada alentadoras: “Eran completamente amateurs y estaban mal preparados”… “Por ejemplo, hace unos días dijeron que deberían de comenzar a practicar artes marciales”. El menor de los problemas es precisamente que el que sean amateurs no les quita peligrosidad.

El día que tanto temía llegó, ya llegó el terrorismo islámico a América Latina a través de simpatizantes americanos sin nexos aparentes con medio Oriente. También recordemos que el extinto Hugo Chávez realizó un tratado de libre comercio con Irán y que desde Venezuela se han comercializado cantidades importantes de armamento sin control aparente. Aunque es cierto que la triple frontera entre Paraguay, Brasil y Argentina (la conocida triple frontera) es uno de los mercados más grandes del mundo, hay que tener en cuenta lo que en Venezuela pasa.

El surgimiento de lobos solitarios de origen americano es inminente y la exigencia a los cuerpos de inteligencia en los diferentes países del continente será más grande que nunca. Ya en América se ha sufrido de terrorismo político y por narcotráfico, pero el terrorismo fundamentalista plantea un reto mayúsculo, donde los perpetradores están dispuestos a inmolarse con tal de ser “portadores” del mensaje de su Dios, la pregunta es ¿Estamos preparados para combatirlos?

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Experto en el tema de seguridad y pandillas.