Por Víctor Flores @literatotanatol

Desde 2015, la FGE de Puebla ha sido omisa sobre solicitudes de información sobre las cifras de edades, condiciones y lugar de donde son rescatadas las víctimas de trata de personas; en el estado, los niños son los más vulnerables a  este ilícito.

Así lo señaló Martín Juárez Guevara, responsable del programa de trata y tráfico de personas del Idhie de la Ibero Puebla, en entrevista con medios de comunicación tras la ponencia “La corresponsabilidad universitaria en la prevención de la trata de personas”, a cargo de Jakeline Vargas Parra, presidenta del Observatorio Latinoamericano sobre Trata y Tráfico de Personas (Observalatrata).

Juárez Guevara agregó que la Fiscalía General del Estado (FGE) argumenta que los datos los tiene los tribunales; mencionó que la opacidad por parte del organismo autónomo en cuanto al acceso de la información “hace dudar sobre la certeza de las estadísticas anteriores”, así como relacionar este problema “con tintes políticos”.

“En un momento determinado tienes un cierto número de personas rescatadas, pero no lo sacas porque es muy pequeño, pero cuando vas a dar un informe de labores sacas datos, los juntas y parece que son una cantidad enorme, por lo cual se maquilla la situación”, refirió.

 

Autoridades solo contabilizan denuncias

Aseveró que sólo se toman en cuenta las demandas que presentan las víctimas, ignorando aquellas que son rescatadas, pero, a veces por temor, no acuden a quejarse ante autoridades.

Argumentó que la impunidad y la opacidad han ocasionado la invisibilidad del tema, trayendo como consecuencia pocas acciones para frenar el problema como que no se pueda avanzar en la aplicación de leyes.

Añadió que en muchos de los casos reportados como desaparecidos también se relacionan con la explotación sexual; en Puebla –aseveró– hay mucho tráfico de mujeres, pero sobre todo niños en los municipios de Puebla, Chignahupan, Altamirano, Esperanza, Libres, Zacatlán, San Andrés y San Pedro Cholula, y San Marín Texmelucan.

“Hay apatía en las autoridades, hay movimiento de mujeres, niños y niñas que son traficados en Puebla y que también son rescatados, pero no sabemos los datos exactos porque sólo se reportan como menores de edad, no hay una clasificación”, insistió.

 

Gobierno debe trabajar con las ONG

Reiteró que en Puebla no hay datos precisos, por lo que exhortó a las autoridades a coordinar trabajo con las Organizaciones No Gubernamentales (ONG).

Por su parte, Vargas Parra, también investigadora del Instituto de Estudios Políticos de la Universidad Autónoma de Bucaramanga, señaló que las instituciones de educación superior deben de contribuir a la prevención de este problema social e incluir a los jóvenes en programas que fomenten el valor humano.

Cabe destacar que Observalatrata está conformada por 121 organizaciones  de 14 países de América latina como Bolivia, México, Guatemala, Perú, Chile y Honduras, tratando de incidir en las poblaciones por medio de la investigación y la intervención en política pública.

 

Foto: Especial