Jorge Rodríguez/A Puerta Cerrada/El Sol de Puebla

Una combinación de aciertos y errores fue lo que llevó al triunfo a José Antonio Gali Fayad y la alianza Sigamos Adelante.

Hasta el cierre de esta columna, el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) daba al ex presidente municipal de Puebla la victoria con 45.18 por ciento de los votos a favor, contra 33.64 por ciento de la priista Blanca Alcalá Ruiz. Los números coincidían con las encuestas de salida que a lo largo de la jornada electoral le dieron siempre la ventaja al hoy futuro gobernador.

Los aciertos, claro está, emanaron del equipo que este domingo se alzó con la victoria.

Eficientes recursos de propaganda política se sumaron al buen desempeño de Gali para construir un candidato altamente competitivo.

De la propaganda sobresalieron los mensajes que vincularon a la abanderada del PRI con el ex gobernador Mario Marín y aquellos que la pusieron frente a los eventuales electores como una ex alcaldesa que no había hecho nada importante por la ciudad.

Los videos que produjo el equipo de campaña de Gali, algunos de ellos convertidos en spots de radio y televisión, cumplieron con creces su objetivo.

El “Blanca se fue en blanco”, que usted recordará bien, fue el recurso mediático mejor acabado y el que mejor refleja lo que aquí se comenta.

Una buena campaña sin un buen candidato no habría servido de mucho.

El triunfo de casi 2 contra 1 que Gali Fayad obtuvo ayer en el municipio de Puebla expone las virtudes competitivas del abanderado.

‘Tony’ Gali, cuyo nombre fue registrado en 2014 como una marca en el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, lo que sirvió para tratarlo como un producto en términos mercadológicos y publicitarios, ingresó a la contienda con un elevado porcentaje de aceptación ciudadana entre los habitantes de la capital.

Su paso por la Secretaría de Infraestructura del gobierno morenovallista y el trabajo realizado en el ayuntamiento de Puebla le dieron argumentos para ir a una exitosa campaña de contraste.

En sentido contrario, los errores vinieron del equipo tricolor.

Blanca Alcalá fue encadenada a Marín después de que ella lo llevara a su registro como precandidata al gobierno del estado y lo subiera al templete frente a la sede del PRI municipal, en la 5 Poniente.

Pese a sus intentos, nunca pudo quitarse el estigma marinista.

Más adelante, mal aconsejada, en plena guerra de spots respondió de manera equivocada al misil “Blanca se fue en blanco”.

“Mis opositores han comentado que mis obras no se ven”, comenzaba en su respuesta, para continuar con un desafortunado: “tienen razón”.

Lo que venía después de esas dos palabras ya no tenía ningún sentido tras la aceptación explícita de aquello que le achacaban sus opositores.

En lugar de frenarlos, con esa reacción los instó a crear un nuevo spot en el que insistieron en su hipótesis, pero esta vez con mejor producción y una cascada de cifras que ayudó a resaltar aún más el contraste.

Verdad o mentira, el contenido de ambos elementos de propaganda obligó a los electores a cuestionar los logros de Alcalá como presidenta municipal y a sacar una conclusión que le resultó desfavorable, demoledora.

Usted dirá que son muchos otros los factores que influyeron en la victoria del candidato de la alianza Sigamos Adelante y la derrota de la abanderada del PRI.

La premura del tiempo hace imposible desmenuzarlos por ahora.

Pero tiene razón.

En ese obligado intento por ir más allá habría que analizar también lo que ocurrió el domingo con la supuesta movilización de estructuras.

Habría que preguntarle a Jorge Estefan Chidiac, por ejemplo, por qué se concentró en obtener un buen resultado en los distritos de Izúcar de Matamoros y Acatlán de Osorio, región por la que es diputado federal, en lugar de desplegar sus labores en todo el estado.

O preguntarle a José Chedraui Budib cómo fue que los operadores de ‘Tony’ Gali le dieron tremenda tunda en el municipio de Puebla.

Tanto el dirigente estatal del PRI como el presidente municipal del mismo partido recibieron un fuerte revés.

Fueron derrotados por Gali y le dieron pésimas cuentas a su candidata.

¿Volverán a pensar en el 2018 después de esto?

Probablemente sí.

Pero esa es otra historia.

Como usted bien sugiere, quedan más elementos por revisar en el análisis postelectoral.

Uno de ellos tiene que ver con el gobernador Rafael Moreno Valle, quien fungió como auténtico coordinador general de campaña.

Ya habrá oportunidad para hacerlo.

 

Para mayor información:https://www.elsoldepuebla.com.mx/columna/9384-/vence-gali-al-pri-candidata-sus-dirigentes

 

 

Fundadora y directora editorial del portal de noticias Ángulo 7. A los 14 años decidió que quería dedicarse al periodismo. Estudió Comunicación en la Universidad Iberoamericana de Puebla. Fue becada...