Por Lorena González
En Puebla el porcentaje de población de 6 a 15 años con rezago educativo fue del 5 por ciento en 2015, el quinto más alto del país, además de superar al nacional del 4.2; sin embargo en 25 años la entidad redujo esta situación en 12.5 puntos porcentuales.
Lo anterior de acuerdo con el documento “Veinticinco años de evolución de las carencias sociales a partir de instrumentos censales, 1990-2015” del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
En 1990, en la entidad poblana, el rezago de este sector de la población era del 17.2 por ciento, mientras que a nivel nacional la cifra fue del 14 por ciento, es decir que en el país esta situación se acortó 9.8 puntos porcentuales.
El estado de Puebla compartió el quinto peldaño con Veracruz que también tiene el 5 por ciento en rezago educativo de este sector de la población.
Los cuatro peores fueron Chiapas, con 8.1 por ciento; Michoacán, con 6.4; Campeche, con 5.6 y Guerrero, con 5.2 por ciento.
En contraparte, con menor porcentaje estuvieron la Ciudad de México, Hidalgo, Nuevo León, Baja California Sur y el Estado de México, con 2.3, 2.4, 2.5, 2.7 y 2.8, en ese orden.
Puebla es cuarto con carencias en servicios de salud
El análisis agregó que, en Puebla, el porcentaje de ciudadanos con carencias en acceso a los servicios de salud fue del 19.4 por ciento hasta 2015, mientras que en el año 2000 era del 74.1 por ciento, es decir se redujo 54.7 puntos porcentuales en 15 años.
Puebla fue de los más rezagados en el tema de salud, al colocarse en cuarto sitio nacional, sólo superado por Michoacán, con 25.2 por ciento; la Ciudad de México y Estado de México, ambos con 20.2 y Veracruz, con 20.1.
En 2015, respecto a la calidad de espacios de la vivienda, 12.3 por ciento de los ciudadanos en el estado presentaba hacinamiento; 5.7 por ciento no contaba con piso de concreto y 4.7 por ciento tenía muros y techos hechos con material inadecuado.
En servicios básicos en los hogares, en el estado, 10.7 por ciento tuvo deficiencias en el servicio del drenaje; 6.9 por ciento tenían, en el agua entubada y 0.9 por ciento padecía por electricidad.
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