Por Lorena González

La armadora automotriz Volkswagen, que sigue enfrentando las consecuencias del escándalo del software trucado, registró una reducción en su beneficio neto (utilidades) del 20.1 por ciento, además de un descenso en sus ventas en Rusia y Brasil.

De acuerdo con un informe financiero, durante los primeros tres meses del año, las marcas de la firma alemana registraron un beneficio neto atribuido de 2 mil 306 millones de euros.

Su director ejecutivo, Matthias Müller, consideró –en un comunicado– que los resultados eran “respetables” dado el escándalo que continúa sacudiendo al gigante germano desde septiembre.

En 2015, Volkswagen registró una pérdida neta de mil 600 millones de euros, la primera en 20 años, debilitado por más de 16 mil millones de provisiones destinadas a hacer frente a los gastos derivados del “diéselgate”.

Cabe recordar que el escándalo inició en septiembre de 2015 cuando se reveló que millones de motores diésel fueron manipulados para que parecieran menos contaminantes de lo que eran en realidad.

 

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