Fermín Alejandro García/Cuitlatlán/La Jornada de Oriente

Atlixco es una plaza en la que están en juego entre 80 y 100 mil votos, por lo que debe ser prioritaria para todas las fuerzas políticas. Sin embargo, resulta sorprendente que el PRI carece de una estructura leal para sacar adelante un triunfo, ya que casi todos los dirigentes del partido y los líderes de las organizaciones priistas, así como las cabezas de los grupos, tienen una misma característica: en pasados procesos electorales apoyaron al PAN o actualmente están integrados a labores proselitistas del albiazul.

Otra peculiaridad es que de Atlixco es originaria la secretaria general del PRI estatal, Rocío García Olmedo, quien además ya ha sido legisladora en dos ocasiones por ese distrito. Esa situación, lejos de ayudar al tricolor lo perjudica, ya que la priista goza de un alto grado de impopularidad entre las bases del partido, que siempre le reclaman no cumplir compromisos y ocuparse poco en los problemas de la región.

El principal respaldo de Blanca Alcalá Ruiz, la candidata del PRI a la gubernatura, para intentar ganar la plaza de Atlixco es el respaldo que le brinda la organización Antorcha Campesina, encabezada por el legislador federal Juan Manuel Celis Aguirre.

Tal situación ayuda poco o nada a Alcalá, ya que en los comicios federales del año pasado el PRI perdió la elección en la cabecera distrital y el grueso de los votos fueron para el PAN, que postuló a Julieta Camacho Mata, una inexperta aspirante a legisladora.

Ese comportamiento del electorado fue una muestra clara y contundente de rechazo hacia Antorcha Campesina, la cual es una agrupación que ganó los comicios por el voto rural, pero que no pudo avanzar en las zonas urbanas y suburbanas.

Por eso las dos giras que ha realizado Alcalá a Atlixco resultaron muy desafortunadas. En la primera porque recibió el respaldo de Antorcha Campesina, lo cual le alejó a muchos priistas que le temen a esta organización. En la segunda visita afloraron las quejas contra Rocío García Olmedo, quien acompañó a la abanderada.

La organización que hasta hace un par de años era el motor que movilizaba a cientos de votantes a favor del PRI era la CROM, encabezada por Leovigildo Jiménez Tapia, quien lleva dos procesos electorales sumado a las filas del Partido Nueva Alianza –que está bajo las órdenes del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas–, como reacción a la poca atención que le prestaba el tricolor.

Más grave resulta que el Comité Municipal del PRI está en manos, desde el año 2014, de Griselva Villavicencio, quien tiene el antecedente de que se enemistó con Armando Saldaña, quien en 2010 fue el candidato priista a la alcaldía de Atlixco, y eso llevó a esta mujer a repartir propaganda a favor del PAN y el entonces aspirante a gobernador, Rafael Moreno Valle Rosas.

Y Armando Saldaña, quien ha sido un alto directivo de Sedesol y de la Sedatu en el actual sexenio federal –de la mano de Juan Carlos Lastiri Quirós–, en el pasado proceso electoral local también se inconformó con el PRI y apoyó al panista Ricardo Camacho Corripio, quien fue edil de Atlixco.

La Confederación Nacional de Organizaciones Populares está a cargo de Álvaro Morales, quien fue candidato del PRI a edil en la pasada elección y se destacó por su pasividad, por no hacer campaña y dejar sembrada la sospecha de que había pactado con el PAN para dejarse derrotar.

En 2013 el PAN enfrentaba un fuerte desgaste en sus índices de popularidad y parecía que se encaminaba a una inevitable derrota electoral, pero ésta no ocurrió porque Álvaro Morales –en su calidad de candidato a alcalde– se la pasó riñendo con líderes priistas y encabezando una campaña deslucida, mal organizada. Ahora es el responsable de captar los votos de las organizaciones sociales a favor de Blanca Alcalá, una situación que en realidad pareciera que fuera una broma de mal gusto.

Por si fuera poco, el último alcalde del PRI que ha tenido el municipio, el líder migrante Eleazar Pérez Sánchez, hace algunos días apareció con ex ediles priistas de Santa Isabel Cholula y Tochimilco, entre otros, fotografiándose con uno de los hijos de Antonio Gali Fayad, el candidato del PAN a la gubernatura, en lo que fue una muestra clara de que sus estructuras están en contra de Alcalá.

Tal situación plantea que en Atlixco la candidata del PRI no tiene aliados que le ayuden a ganar la elección.

Pareciera que al PRI no le interesa sacar un buen resultado en Atlixco. Frente a ello es fundamental preguntarse:

¿Esto pasa solo en Atlixco?

¿O es un problema que se repite en otras plazas importantes del estado?

Algo me dice que no es un hecho aislado.

Para mayor información:http://www.lajornadadeoriente.com.mx/2016/04/21/a-lideres-priistas-de-atlixco-les-une-la-ayuda-que-prestan-al-pan/

 

Fundadora y directora editorial del portal de noticias Ángulo 7. A los 14 años decidió que quería dedicarse al periodismo. Estudió Comunicación en la Universidad Iberoamericana de Puebla. Fue becada...