Por Alejandra Olivera

Miles de fieles poblanos participaron en la XXV edición de la procesión de este Viernes Santo, quienes dirigieron sus miradas y plegarias llenas de fe a cada una de las cinco imágenes religiosas más representativas de Puebla durante su recorrido por las principales calles de la capital.

Esta procesión sirvió como punto de encuentro de reflexión y renovación espiritual de quienes acompañaron a las dos imágenes marianas que aluden el momento dramático y a las tres de Jesús con la cruz a cuestas.

El acto estuvo encabezado por el arzobispo Víctor Sánchez Espinoza, del rector de la Upaep, Emilio Baños Ardavín; además llamó la atención la presencia del alcalde, Luis Banck Serrato, quien junto con todos los católicos que asistieron recorrió varias calles del centro de la ciudad.

Las imágenes, consideradas las más veneradas de la angelopolis, arribaron al atrio de la Catedral entre las 11:00 y 11:50 de la mañana, mismas que llegaron acompañadas por muchos de sus devotos seguidores.

 

Participar en el ministerio de la pasión, pide arzobispo

Minutos antes de iniciar la procesión el arzobispo dio su primer mensaje donde manifestó que los católicos debieron preparar sus corazones durante la cuaresma para participar en el misterio de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.

Además, dijo que “al celebrar estos tres días recordando con toda fe y devoción el camino de la cruz de Cristo seguimos al Señor para que participando de su cruz tengamos parte con él en su resurrección y podamos llegar a la Jerusalén del Cielo“.

Dicho esto, el recorrido partió de la Catedral alrededor del mediodía, siendo Nuestra Señora de la Soledad la primera imagen en hacerlo, le siguió Jesús de las Tres Caídas, en tercer lugar fue la Virgen Dolorosa del Carmen, posteriormente fue Jesús Nazareno de San José y el Señor de las Maravillas, este último el que más fieles tuvo durante todo el camino.

Cada una de las imágenes era esperada ansiosamente por las familias de feligreses –que esperaron hasta dos horas sobre las banquetas— y quienes durante su paso vitorearon a cada una de ellas.

La ruta estuvo marcada por la avenida 16 de septiembre hasta la calle Juan de Palafox y Mendoza, siguió por la 2 Sur hasta la 4 oriente, donde tomó en sentido contrario hasta la 11 norte y llegar hasta “el gallito” en la avenida Reforma a las 13:30 horas para hacer una estancia de 15 minutos.

 

Participar con devoción, da indulgencia

Durante ese tiempo, Sánchez Espinoza dio el segundo mensaje a los fieles a quienes recordó que participar con devoción y en gracia en la procesión les permite obtener indulgencia plenaria.

Asimismo, de acuerdo a la liturgia de la iglesia veneró el Árbol de la Cruz, pues “cuando Adán, movido a engaño comió el fruto del Edén, el Creador, compadecido,desde entonces decretó que un árbol nos devolviera lo que un árbol nos quitó”.

Posteriormente la procesión continuó por la avenida Reforma hasta la calle 16 de Septiembre para llegar al atrio de la Catedral entre las 14:35 y 15 horas, la primera imagen en hacerlo fue Nuestra Señora de la Soledad y la ultima el Señor de las Maravillas.

 

Día de reflexión

Una vez que llegaron todas las imágenes, el líder de la grey católica emitió su tercer y último mensaje, donde mencionó que la iglesia celebra este día como de reflexión y de contemplación de nuestra historia de salvación a través de la Pasión de Jesús.

Asimismo, dijo que la Semana Santa es un espacio para el recuento de los actos, periodo que las personas no pueden pasar inadvertido pues les ayuda a enriquecer su vida y convivencia con el prójimo.

Cabe mencionar que la Semana Santa es el periodo litúrgico que de acuerdo al calendario lunar, recuerda la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, y posteriormente su pasión, muerte y resurrección. El periodo inicia desde el domingo de ramos y concluye el domingo de pascua.

 

Foto: EsImagen