Por Redacción
Este martes, se reabrió la presidencia municipal de Huehuetlán El Grande, tomada el 18 de febrero, luego de que pobladores y regidores la cerraron porque acusaron que cinco funcionarios seguían trabajando pese a que fueron suspendidos.
De acuerdo con la Secretaría General de Gobierno (SGG), el secretario general de la Comuna, Olegario Ávila, indicó que querían ejercer presión para que cinco funcionarios municipales no siguieran en el ejercicio de sus cargos públicos porque fueron destituidos en Sesión de Cabildo, celebrada a principios de febrero de 2016.
Empleados de la Dirección General de Gobierno de la SGG acordaron con los inconformes revisar cada caso y actuar conforme a derecho.
Cabe mencionar que el día que fueron tomadas las instalaciones, habitantes también acusaron que al edil, José Santamaría Zavala, de adeudar los salarios de un año a regidores y usar a los policías como escoltas.
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