Por Edgar Guzmán Uribe @Edd_g89

Atender las necesidades de las personas y tener mayor apertura a la participación social influyen de manera positiva a los gobiernos y, a su vez, ayuda a generar una ciudad más equitativa con una mejor calidad de vida a sus habitantes.

Así lo señalo el alcalde Antonio Gali Fayad al participar en la conferencia “Diálogo entre Puebla y Medellín: La equidad como prioridad de la acción local”, en el marco del último día del congreso Smart City, donde puntualizó que no basta con escuchar las demandas de la población, sino que deben ser resultas para devolver la credibilidad hacia las instituciones.

Sostuvo que para el 2050, el foco de atención de la población se concentrará en las ciudades, sin embargo, es necesario trabajar de adentro para fuera y poner atención específica en el campo.

En ese sentido, subrayó la importancia de trabajar en conjunto con los tres órdenes de gobierno y sin distingos partidistas, además de dar mayor aforo a la población para resarcir los rezagos en las áreas de salud, educación, deporte y servicios públicos, entre otros.

Violencia y desigualdad, principales problemas en AL

Por su parte, Aníbal Gaviria Correa, exalcalde de la Ciudad de Medellín, coincidió en que la participación social es “crucial” para alcanzar el desarrollo integral de la sociedad y el bienestar colectivo.

Indicó que en la mayoría de las ciudades de América Latina se han visto afectan por dos grandes problemas que son la violencia y desigualdad, por lo que la innovación debe ocuparse como herramienta para construir ciudades más equitativas.

Ejemplifico que Medellín entre 1990 y 2000 registraba el 20 por ciento de los homicidios totales de Colombia, pues tenía una tasa de 400 delitos por cada 100 mil habitantes, sin embargo, para el 2015 dicha demarcación salió del ranking de las metrópolis más violentas del mundo.

En ese sentido, dijo que actualmente de las 50 urbes más peligrosas del mundo, 42 se encuentran en América Latina, mientras que el resto se divide entre Estados Unidos con cuatros y África también con cuatro.

 

Foto: Especial