Fermín Alejandro García/Cuitlatlán/La Jornada de Oriente

 

Aunque se esté desplegando ahora un discurso entre los morenovallistas para minimizar, despreciar, ningunear al PRD, lo cierto es que el fracaso de formar una alianza con el instituto del sol azteca le va a provocar una severa pérdida al bloque electoral del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas en imagen, en la posibilidad de entrar en un sector de la ciudadanía que le es adverso y posiblemente en una pérdida que puede oscilar entre los 150 mil y los 200 mil votos, algo muy grave si se parte que habrá una cerrada contienda entre el PRI y el PAN.

Sin contar que este fin de semana el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas perdió una parte esencial de su capital político: que era el ser considerado como el principal artífice de las alianzas electorales en el país, pues le gustaba ufanarse que era “un aliancista”, que lograba unir a fuerzas políticas de diferentes perfiles ideológicos.

Y lo más grave –para el mandatario– es que el tema de Puebla saltó a la opinión pública nacional sin que el gobernador o sus operadores políticos pudieran argumentar a su favor. Al final quedó plasmado que la negativa del PRD a aliarse no era por un mal entendido, sino que es consecuencia de la represión y persecución que Rafael Moreno Valle Rosas ha desplegado contra activistas sociales, así como la violencia política que acostumbra a utilizar para gobernar.

Si se revisan columnas, notas, entrevistas y trascendidos que difundieron periódicos y noticieros de radio del Distrito Federal, no hubo argumentos a favor de Moreno Valle. Nadie lo defendió, situación que incluye a la cúpula del PAN. Solo quedaron expuestos los argumentos del PRD, que se apreciaron como una posición convincente.

Ahora para entender cuál va a ser el daño que va a sufrir la coalición electoral de Moreno Valle –con la que buscará retener el control del Poder Ejecutivo de Puebla– por el divorcio con el PRD, es necesario tomar en cuenta lo siguiente:

Unos 20 días después de que en 2010 el PRI perdió Casa Puebla, quien en ese entonces dirigía este partido a nivel estatal le confió a este columnista, palabras más, palabras menos:

“Una semana después de que se acordó la alianza entre el PRD y el PAN, nuestro candidato –Javier López Zavala– de un trancazo perdió entre 8 y 10 puntos de preferencias electorales, y desde ese momento ya no se pudo mejorar la situación”.

Y es que el fondo del asunto es que Moreno Valle no busca la alianza con el PRD por los 80 o 100 mil votantes que generalmente tiene ese partido cuando compite solo.

La importancia del PRD radica en que al unirse con el PAN se genera una propuesta electoral con una imagen de ser un frente plural, incluyente, tolerante y con perfil ciudadano, que permite generar la idea de que puede provocar un cambio social que no ofrecen el grueso de los políticos profesionales.

En 2010, la unión de Moreno Valle, el PAN, el PRD, el partido Convergencia y el Panal, creó la idea de que había una opción electoral que iba a erradicar el autoritarismo, la falta de división de poderes y de transparencia en el sistema político estatal. Se le dio una imagen ciudadana a ese frente electoral.

En el presente a Moreno Valle le urge recuperar ese recurso electoral, luego del desencanto ciudadanos que existe hacia su administración.

Si no logra recuperar el voto de los ciudadanos que son ajenos a los partidos políticos, que generalmente no sufragan, que en cada contienda cambian de preferencias, tendrá un severo problema porque el PAN no tiene los números suficientes para poder ganar la contienda de la minigubernatura.

Generalmente cuando se alían dos partidos y su unión es exitosa, ambas partes acaban aportando mucho más votos de los que tradicionalmente podían generar si compiten solos.

En el caso del PRD, se estima que su unión con el PAN podía aportar entre 150 mil y 200 mil votos, cuya ausencia ahora podrían ser un factor de derrota para el bloque morenovallista.

Los sondeos más serios colocan al PRI hasta con 7 puntos de ventaja sobre el PAN, en una situación en donde el blanquiazul ya no tiene muchas posibilidades de crecer por enfrentar el desgaste de poder que ha significado los escándalos de corrupción, de represión y de frivolidad que han caracterizado al gobierno de Moreno Valle.

Quien será la candidata del PRI, la senadora Blanca Alcalá Ruiz, tiene a su favor que explotará el tema de la equidad de género, su imagen de cordialidad y de tolerancia, que contrastan severamente con el actuar de Rafael Moreno Valle. En la actualidad la legisladora tiene una ventaja de unos 4 puntos sobre el PAN.

Con que el Partido Revolucionario Institucional logre crecer unos pocos puntos en las preferencias electorales, tal como lo hizo en los comicios federales de 2015 con una campaña mediática antimorenovallista, el tricolor obtendrá una ventaja que difícilmente podrá ser remontada por el albiazul.

Si se llegara a dar el anterior escenario, la ausencia de los votos del PRD podrían ser el factor decisivo para una posible derrota del morenovallismo.

Por lo que el divorcio del instituto del sol azteca con el PAN le va a quitar el sueño al gobernador de aquí al día de la elección.

Para mayor informacion:http://www.lajornadadeoriente.com.mx/2016/01/28/una-perdida-de-unos-200-mil-votos-tendra-rmv-por-su-divorcio-con-el-prd/

Director general y fundador del portal de noticias Ángulo 7. Es originario de Puebla y estudió Ciencias y Técnicas de la Comunicación en la Universidad Cuauhtémoc. Ha sido reportero en los periódicos...