Por Eduardo García Anguiano
Si se extraditara al prófugo de El Altiplano a los Estados Unidos de América, se corroboraría que no se le protege en México.
Hagamos un breve recuento retrospectivo del caso:
•Fue detenido en Guatemala y entregado a nuestro país en el sexenio de Carlos Salinas.
•Se le recluyó en un penal y se fugó por vez primera en el sexenio de Vicente Fox.
•Anduvo libre y no fue detenido en el sexenio de Felipe Calderón.
•Fue recapturado en el sexenio del presidente Enrique Peña.
•Se fuga, es buscado y detenido nuevamente en 2016.
La tercera captura tiene como conclusiones:
•No se le protege como se había especulado, pues el propio hecho de recapturarlo así lo desmiente.
•No muere en el operativo de detención producto de algún enfrentamiento o no se le asesina.
•Se encuentra preso y en curso la extradición solicitada por el gobierno estadounidense.
¿Cuáles serían las deducciones de los hechos anteriores?
•Durante su tiempo como prófugo de la justicia, trabajó en su actividad delictiva y su crecimiento en la delincuencia organizada lo hizo aparecer en Forbes como una persona con recursos económicos cuantiosos.
•Al ser detenido nuevamente o en el caso de ser extraditado, permite inferir que no se le protege como antaño cuando no fue objetivo prioritario del sexenio de la “guerra contra las drogas” y por lo tanto, no se le capturó.
El escritor francés Jean de la Bruyere dijo: “La lógica es la técnica por la que añadimos convicción a la verdad”.
@EGAnguiano
*Las opiniones expresadas en esta sección son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente la línea editorial del portal de noticias Ángulo 7.