Por redacción
México es el segundo productor de chiles en el mundo, por lo que, en Jalisco, se ejecuta un proyecto para extraer la capsaicina –componente de pimientos picantes– y aprovechar sus principios activos en aplicaciones farmacéuticas.
Así lo señaló, en entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, el ingeniero Marcos Godoy Zaragoza, del Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (Ciatej).
El investigador aseveró que el cultivo del chile representa la octava derrama económica de la agricultura nacional equivalente a 13 mil millones de pesos al año, de acuerdo con datos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).
Con el propósito de dar valor agregado a este producto, reiteró que el Ciatej ejecuta un proyecto para extraer la capsaicina; la extracción se realiza a través del proceso de fluidos en estado supercrítico, el cual es ideal para obtener las mayores concentraciones de capsaicinoides sin residuos que puedan ser tóxicos.
Este procedimiento consiste en el uso de dióxido de carbono comprimido de manera tal que está en estado líquido; este es sometido a un proceso en el que se eleva a varias atmósferas de presión para generar un estado supercrítico.
Pungencia de chiles mexicanos
El científico indicó que están sometiendo a prueba diversos tipos de chiles producidos en México para hacer una caracterización de ellos.
La investigación, dijo, se centra en la obtención de extractos ricos en capsaicinoides, cuya concentración supera a otros extractos obtenidos con otros solventes y tienen un nivel alto de pungencia –picor–
Hasta el momento han sometido a prueba algunas variedades como el habanero ya que con fama de ser muy picante, tiene entre 100 hasta 350 mil unidades de Scoville –medida de picor– mientras que en el extracto obtenido en el Ciatej se han detectado hasta tres millones de unidades, a diferencia del chile serrano que no es viable económicamente por tener bajos niveles de capsaicina, a pesar de que si se come fresco enchila mucho.
La capsaicina es un analgésico muy eficiente que no tiene ningún efecto secundario para el organismo, este puede ser utilizado en el área de salud como una herramienta para el control de obesidad, además, desde el punto de vista epidérmico, la capsaicina es un analgésico muy eficiente que no tiene ningún efecto secundario para el organismo.
De acuerdo con Godoy Zaragoza, el problema es que no hay un mecanismo que lleve la capsaicina íntegra al sitio donde se requiere, por tal motivo el reto es generar esos mecanismos.
Editado por: Jessica Meléndez Zenteno
