Por Eduardo García Anguiano
El cannabis sirve para fabricar: hilo cáñamo, telas, papel, biodiesel, diferentes medicinas, además de su uso recreativo y religioso.
Las iniciativas que en 2015 destacaron para institucionalizar un nuevo paradigma sobre la hierba en México fueron:
•El amparo concedido a los familiares de una menor que importaron medicinas con base cannabis para fines terapéuticos.
•La decisión de la Suprema Corte de Justicia de la nación que concedió el amparo a cuatro personas para sembrar, cosechar y consumir cannabis.
•La entrega a esas cuatro personas de los permisos respectivos por parte de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
•El Senado de la República creó un Consejo Técnico para las Alternativas de Regulación, que recogerá las opiniones en audiencias públicas sobre el uso y posesión de la hierba.
•La Secretaría de Gobernación anunció que, en 2016, se llevarán a cabo diversos foros de diálogo y debate en el país, sobre el rumbo que se dará al tema de la marihuana.
•El Jefe de Gobierno del Distrito Federal dio a legisladores una propuesta para despenalizar el uso médico del cannabis, que será llevada a la Cámara de Diputados.
Existen otras iniciativas para realizar modificaciones legales en la Asamblea de Representantes del Distrito Federal y en la Cámara de Diputados, que no han sido discutidas y por otra parte, diversos ciudadanos han solicitado a la Cofepris permisos para el uso de cannabis.
En el futuro la disyuntiva nacional será como lo expresara el psiquiatra suizo Carl Jung: “El péndulo de la mente alterna entre sentido y sinsentido, no entre el bien y el mal”.
@EGAnguiano
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