Por Redacción
Mauricio Macri hizo juramento este jueves como nuevo presidente de Argentina, en donde recordó los tres ejes que prometió antes de ganar las elecciones: “pobreza cero, derrotar el narcotráfico y unir a los argentinos”.
Así, hizo efectivo el traspaso de poder al momento en el momento que firmó en el libro de honor, con lo que puso fin a doce años de kirchnerismo, época que dejó a la nación Argentina con una alta inflación y salarios insuficientes para subsistir.
El presidente argentino pronunció un breve discurso ante el Congreso, e invitó al público a dejar atrás la guerra “de derechas y de izquierdas, peronistas –populistas– y antiperonistas”.
Los dirigentes más imponentes del peronismo no acudieron al discurso de Macri, incluida la expresidente Cristina Fernández de Kirchner, quien se suponía que le pondría la banda a su sucesor. En cambio, este acto lo realizó el también macrista y presidente transitorio del Senado, Federico Pinedo.
A pesar de la clara oposición del Congreso, compuesto en su mayoría por kirchneristas, Daniel Scioli, quien fue su rival y candidato de la expresidente, acudió a la ceremonia de traspaso de poder, así como otros gobernadores que apoyaban a Fernández de Kirchner.
Antes del discurso, Macri fue escoltado hacia el Congreso por 300 gradaderos a caballo, como es tradición en Argentina, y acompañado de su esposa, la empresaria textil Juliana Awada, y de su hija pequeña, Antonia. En medio del camino, el presidente rompió con el protocolo al abrir la puerta del vehículo que lo trasladaba para saludar a los militantes. La primera dama copió dicho gesto.
Los militantes le respondieron con vítores, sin embargo, el presidente recalcó durante su discurso que el 48 por ciento de los argentinos rechaza su cargo, por lo que hizo un llamado a la unión.
Por otra parte, la expresidente logró llenar la plaza de Mayo para su despedida este miércoles, y demostró la fuerza política que aún conserva. Macri también la llenó de fieles este jueves.
Con el comienzo de la era Macri, él salió al balcón histórico de la Casa Rosada, el de los discursos de Juan Domingo Perón –impulsador del peronismo y quien fue el presidente argentino desde 1952 a 1977– y su esposa Evita. Pero Macri incluso llegó a bailar allí una cumbia, cuando Fernández de Kirchner siempre rechazó salir a ese balcón, por respeto a la esposa de Domingo Perón.
Editado por: Marta Romero
Fuentes: El País, Clarín y El Mundo
Foto: Agencia San Luis