Por Lorena González Guzmán
Por sus bajos niveles de transparencia en normatividad, presupuesto, gestión y rendición de cuentas, el Congreso de la Unión, con 37 por ciento, obtuvo el cuarto resultado más bajo de nueve asambleas legislativas latinoamericanas.
Lo anterior de acuerdo con el “Índice Latinoamericano de Transparencia Legislativa 2014” de la Red Latinoamericana por la Transparencia Legislativa, donde, en promedio, los Congresos o Asambleas Nacionales de los nueve países analizados obtuvieron 40 por ciento de transparencia.
El índice se encuentra dividido en cuatro dimensiones: normatividad, labor del congreso o asamblea; presupuesto y gestión administrativa así como mecanismos de participación, atención ciudadana y rendición de cuentas, en las que el recinto legislativo de México obtuvo una calificación de 47, 45, 21 y 33 por ciento, respectivamente.
En cada una de las cuatro categorías se evaluaron otros criterios; en el caso del Legislativo de México, en “normatividad”, los criterios que reportaron cero por ciento fue en la publicación de los temas a tratar en la sesión del pleno y en la inexistencia de oficina regionales que vinculen a la ciudadanía.
En “labor”, el Congreso mexicano logró cero por ciento en el tema de asistencia a las sesiones de comisiones, así como la existencia de opacidad acerca de cuáles, cuántos y de parte de quién son “obsequios” que llegan a recibir los legisladores.
Sin publicar estados financieros por viajes de legisladores
Respecto a “presupuesto” el Congreso de México obtuvo cero por ciento en la publicación de los estados financieros por viajes de los legisladores por motivo de trabajo dentro y fuera del país.
Finalmente, en “mecanismos de participación”, el parlamento mexicano se llevó un cero por ciento en participación ciudadana.
Por su parte, Perú y Chile obtuvieron los promedios más altos en transparencia, con 55 y 53 por ciento, respectivamente, en tanto, Venezuela, Bolivia y Argentina fueron los más bajos, con 21, 25 y 36 por ciento, respectivamente.
Cabe mencionar que el estudio recomendó la existencia de una norma que regule la publicación de información y genere procedimientos para el acceso a la información que permitan un conocimiento eficaz sobre el funcionamiento de los Congresos.
Foto: La voz