Por: Lorena González Guzmán

De los 34 países que integran la OCDE, México es de las naciones en donde 30.9 por ciento de las empresas reportan más dificultades para emplear gente con las capacidades que requieren, esto se traduce en bajo rendimiento económico.

Lo anterior de acuerdo con el informe “Políticas prioritarias para fomentar las habilidades y conocimientos de los mexicanos para la productividad y la innovación”, realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

A diferencia de las empresas nacionales, el promedio de problemas para encontrar personal capacitado en compañías de los países miembros de la OCDE fue del 14.8 por ciento.

Asimismo, en el mismo reporte, México fue el peor evaluado en productividad laboral de las 34 naciones,  con una calificación de 20, en una escala de 100 puntos, mientras que la media en el resto de las naciones fue de 50.

Luxemburgo obtuvo la mejor calificación, con más de 90; seguido de Noruega, Estados Unidos, Bélgica y Holanda.

 

Productividad laboral, por debajo de la de Chile

México fue el último de la lista; otros de los países que reportaron baja productividad laboral, pero que superaron a la del país fueron Chile, Polonia, Hungría y Estonia.

El organismo indicó que el “mediocre” desempeño del país azteca, en términos de productividad puede explicarse por el bajo nivel de competencias de su fuerza laboral, ya que las bajas capacidades adquiridas en la escuela no son superadas en un marco laboral y empresarial con bajos niveles de innovación

Los trabajadores que ingresan en el mercado laboral muy pocas veces se conectan con actividades tecnológicas de alto nivel. Esto se debe a la poca innovación de la economía mexicana.

Entre los países OCDE, México tiene un puntaje muy bajo en materia de patentes y publicaciones científicas relevantes; además, la inversión pública y privada en materia de tecnología se encuentra por debajo del nivel observado en el organismo.

Otro factor es que los estudiantes que no consideran el valor de dedicar más esfuerzo a la educación, debido a la alternativa de trabajar en el sector informal. De acuerdo con datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en 2013 cerca del 54 por ciento de los trabajadores fueron informales.

El nivel de educación de la fuerza laboral mexicana se sitúa muy por debajo del promedio de la OCDE. En 2012, sólo el 22 por ciento de todas las personas de entre 25 y 34 años de edad completaron la instrucción media superior, porcentaje que corresponde con la mitad del promedio del organismo.

El documento concluyó aseverando que una fuerza laboral “bien instruida” es esencial para una economía innovadora, pues permite inventar nuevos productos y servicios, así como desarrollar nuevos procesos que se adapten a los cambios que dicta el paso del tiempo.

Foto:Especial

Fundadora y directora editorial del portal de noticias Ángulo 7. A los 14 años decidió que quería dedicarse al periodismo. Estudió Comunicación en la Universidad Iberoamericana de Puebla. Fue becada...