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Escrito por: Redacción

Investigadores de la BUAP diseñaron un dispositivo para medir la propagación de la actividad electroencefalográfica e identificar en qué zonas del cerebro se producen focos epilépticos en personas con esa enfermedad.

Elías Manjarrez López y Jesús Ángel Tapia López, profesores investigadores del Instituto de Fisiología y de la Escuela de Biología, respectivamente, son los creadores del denominado “Trayectómetro”: instrumento para calcular el desarrollo de las señales sensoriales cerebrales, así como de ciertas tareas cognoscitivas, que brindará grandes ventajas a la parte clínica.
“Nuestra hipótesis es que con la ayuda de nuestro dispositivo, un especialista será capaz de detectar la trayectoria de las ondas y mapear en tiempo real la zona cerebral en donde se producen; de este modo, tendrá la posibilidad de aplicar algún otro método, como la estimulación magnética transcraneal, para parar la crisis convulsiva”, señaló Manjarrez López.
Dicho instrumento está basado en el método de cálculo de trayectorias del centro de masa de ondas electroencefalográficas (EEG), desarrollado por primera vez por Elías Manjarrez López, en 2007, y publicado en la revista Brain Research de la editorial Elsevier. Por su parte, Jesús Tapia López, de Ciencias Fisiológicas por la BUAP, fue el encargado del diseño electrónico del dispositivo.
La presente invención está conformada por un circuito electrónico analógico y un sistema de Diodos Emisores de Luz (LED’s, por sus siglas en inglés) acoplados a una gorra de EEG, que permiten calcular y visualizar en tiempo real y de manera no invasiva las trayectorias de propagación de las ondas eléctricas cerebrales.
De acuerdo con Elías Manjarrez, de Neurociencias por el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav-IPN), “el procedimiento consiste en emplear el algoritmo del centro de masa que se usa en la Física, pero sustituyendo la magnitud de ‘masa’ por la magnitud física de ‘potencial eléctrico’, que registra cada electrodo de EEG. De esta forma fue posible caracterizar, mediante un software, la propagación de ondas en el cerebro de una persona”.

 

El “Trayectómetro”, una innovación tecnológica

En procesos patológicos como la epilepsia, en el cerebro se activan diferentes regiones como el lóbulo occipital, la zona frontal o temporal de manera irregular, debido a la propagación de un grupo de ondas eléctricas. Éstas se trasladan de un lado al otro de la masa encefálica; sin embargo, aún no se conoce porqué se producen de manera aleatoria, una vez que se ha detonado la crisis convulsiva.
“Fue por eso que nos dimos a la tarea de diseñar un instrumento que nos permitiría calcular la velocidad de propagación de las ondas y así ubicar la zona cerebral exacta en la que se produce el foco epiléptico”, refirió Elías Manjarrez.
El investigador dio a conocer que hay casos en los que a los pacientes se les tiene que cortar el cuerpo calloso, que es la estructura que conecta a los dos hemisferios cerebrales, derecho e izquierdo, cuando presentan ataques epilépticos muy fuertes que ponen en riesgo sus vidas.
“No obstante, a pesar de llevar a cabo este procedimiento paliativo, aún existe la posibilidad de que las ondas epilépticas se sigan propagando a lo largo de la masa gris, debido a posibles conexiones bilaterales en el tálamo, que es una zona de la base del cerebro que indirectamente conecta a ambos hemisferios”, argumentó.
Manjarrez López destacó que con el “Trayectómetro” será posible describir, de manera precisa y no invasiva, qué es lo que ocurre con las personas a las que se les ha hecho, o no, la callosotomía y si se produce la activación de nuevas señales epilépticas.
Asimismo, indicó que una vez que se cuantifique el recorrido de las ondas, pueden buscarse opciones para detener los focos epilépticos con la ayuda de diferentes procedimientos médicos que, al conjuntarse con su invento, contribuirían al mejoramiento del paciente.
Gracias a su innovación tecnológica, este proyecto cuenta con la solicitud de registro de patente ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) número MX/a/2012/011285, con la denominación “Trayectómetro de Señales Eléctricas Cerebrales”.

 

Foto: Cortesía BUAP